Ya tenemos medio mes de Julio pasado y desde el blog de lacestitadelbebe.es nos hemos propuesto que lo paséis lo mejor posible con vuestros peques.
Por eso hemos decidido hablar hoy sobre los beneficios de los masajes en los bebés. Esta técnica relaja a los bebés y mejoran muchos de los síntomas de los trastornos más habituales como son los cólicos de los lactantes.
El masaje que recibe el bebé procurado por su mamá es un lenguaje no verbal que otorga una sensación de bienestar física y también mental. Permite captar y mejorar sus estados de ánimo, conocerle mejor y generar es relación de confianza o apego. Por lo tanto, podríamos decir que es una forma de transmitir afecto y ternura de una forma que no necesita palabras, sólo la conexión mamá y bebé.
Para dar el masaje lo más recomendable se realizar movimientos en forma de rotación sobre las partes del cuerpo que queramos relajar con una ligera presión. En el tema de los cólicos mejoran mucho, a lo mejor no lo quitan del todo pero la sensación es que se alivian mucho y pueden dejar de llorar. Las mejores superficies para dar el masaje son las blandas y confortables, como la cama o un cambiador. Los masajes se deben dar como hemos comentado haciendo rotaciones en el abdomen o partes del cuerpo que queramos tratar y ofreciendo una ligera presión. En el caso de los cólicos también es conveniente doblar las piernas como una ranita.
Los mejores momentos para realizar esta técnica es en la hora del baño, cambiarlo de ropa, cambios de pañales, después de la siesta y la toma o antes de dormir. Si detectamos que el bebé llora por este motivo podemos aplicarlo cuando sea requerido sin problema.
La duración del masaje puede venir dada por la mamá que se cansa o ve mejoras en el estado del niño. O también el propio bebé lo indicará poniéndose más nervioso de lo habitual y ya mostrando incomodidad.
Si el bebé es muy movido recomiendan dar el masaje sentado, o posición buda. Entrecruzándole las piernas y cogido de los brazos, pero con la posibilidad de que pueda mirar al mundo y su espalda contra tus piernas o vientre.
Para los cólicos van muy bien estos masajes y tener en cuenta la correcta colocación en la succión a la hora de mamar, de esta forma se evitan los excesos de aires que tantas molestias provocan. Para terminar respecto a los masajes en la cara no se recomiendan, ya que no aporta mucho, siempre en la frente y alrededor de ojos y nariz de forma muy delicada.
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