La dermatitis atópica es una afección común en los más pequeños y se caracteriza por piel muy sensible, seca y propensa a la irritación. Cuando un bebé tiene este tipo de piel, es fundamental establecer rutinas de cuidado diarias que le ayuden a mantenerla hidratada y protegida.
En La Cestita del Bebé te ofrecemos esta guía para que sepas cómo cuidar su piel con cariño y de forma efectiva.

1. Baños suaves y cortos
El baño debe ser un momento agradable y protector para su piel. Lo más recomendable es:
- Utilizar agua templada (nunca demasiado caliente).
- Limitar la duración del baño a unos 5-10 minutos.
- Emplear limpiadores sin jabón y con fórmulas suaves para piel sensible.
- Secar con una toalla de algodón, dando toquecitos suaves sin frotar.
Este simple cuidado diario evita la pérdida excesiva de humedad y reduce la irritación.
2. Hidratación inmediata
La hidratación es la clave para fortalecer la barrera cutánea y prevenir brotes de dermatitis atópica.
- Aplica una crema o loción emoliente justo después del baño, mientras la piel aún está ligeramente húmeda.
- Repite la hidratación al menos dos veces al día.
- Escoge productos sin perfumes ni alcohol, pensados para pieles delicadas.
3. Ropa adecuada para piel sensible
El contacto con ciertos tejidos puede irritar la piel atópica. Para evitarlo:
- Elige prendas de algodón o fibras naturales.
- Evita lana y tejidos sintéticos.
- Lava la ropa con detergentes suaves y sin suavizante.
- Aclara bien para eliminar restos de jabón.
4. Cuidado del entorno
El ambiente donde vive el bebé influye mucho en la salud de su piel.
- Mantén la habitación ventilada a diario.
- Evita acumulación de polvo, peluches o alfombras.
- Conserva una temperatura moderada y, si el aire está muy seco, utiliza un humidificador.
5. Control del picor
El picor es uno de los síntomas más molestos de la piel atópica.
- Mantén las uñas del bebé cortas para evitar lesiones al rascarse.
- Usa manoplas de algodón si es necesario.
- Viste al bebé con ropa ligera para evitar sudor excesivo, que puede agravar el picor.
6. Alimentación y cuidados adicionales
En algunos casos, ciertos alimentos o factores externos pueden empeorar los brotes.
- Observa si hay relación entre lo que come y el estado de su piel.
- Evita perfumes, colonias y productos con alcohol.
- Protege su piel del sol con ropa adecuada y protectores solares para bebés.
7. Constancia: el mejor tratamiento
La piel atópica requiere cuidado diario y constante. Seguir estos pasos no solo ayuda a mejorar la piel, sino que previene la aparición de nuevos brotes y aporta confort al bebé.
En La Cestita del Bebé encontrarás consejos, productos y detalles para el cuidado de tu pequeño, siempre pensando en su bienestar y en hacer tu día a día más fácil. Cuidaros mucho y nos leemos en la próxima ocasión! Chao!