Con la llegada del otoño llegan de nuevo los dichosos
catarros, el inicio del curso escolar hace que nuestros pequeños estén más
expuestos a los virus y por ende nosotros mismos terminemos contagiándonos.
catarros, el inicio del curso escolar hace que nuestros pequeños estén más
expuestos a los virus y por ende nosotros mismos terminemos contagiándonos.
Por otro lado las diferencias bruscas de temperatura,
diferencia entre el día y la noche, incluso entre la mañana y la tarde, hacen
que en un momento del día nos descuidemos y vayamos con poa ropa o con exceso
de la misma y luego después de sudar nos desvestimos y es ahí cuando cogemos
frío.
diferencia entre el día y la noche, incluso entre la mañana y la tarde, hacen
que en un momento del día nos descuidemos y vayamos con poa ropa o con exceso
de la misma y luego después de sudar nos desvestimos y es ahí cuando cogemos
frío.
Primeros síntomas: dolor
de garganta, malestar general, tos seca o con mucosidad, obstrucción nasal,
fiebre. Los síntomas suelen ser más intensos en los tres primeros días para ir
decayendo en el trascurso de una o dos semanas.
de garganta, malestar general, tos seca o con mucosidad, obstrucción nasal,
fiebre. Los síntomas suelen ser más intensos en los tres primeros días para ir
decayendo en el trascurso de una o dos semanas.
Prevención:
– La medida más
eficaz es el lavado de las manos, un estudio demostró que un lavado exhaustivo
de las manos en diferentes momentos del día (siempre antes de comer y después
del baño) reducía en un 50% las
infecciones respiratorias y digestivas.
eficaz es el lavado de las manos, un estudio demostró que un lavado exhaustivo
de las manos en diferentes momentos del día (siempre antes de comer y después
del baño) reducía en un 50% las
infecciones respiratorias y digestivas.
– Utilizar pañuelos desechables.
– Tápese la nariz al toser y al estornudar para evitar contagios.
– Evite los ambientes cargados.
– Evite el tabaco.
-Evite los cambios bruscos de temperatura.
– Protéjase del frío.
– Beba gran cantidad de líquidos para que las secreciones nasales sean más
fluidas.
fluidas.
– Mantenga las vías respiratorias húmedas. Puede ser conveniente humidificar
el ambiente y realizar inhalaciones de vapor.
el ambiente y realizar inhalaciones de vapor.
– En niños pequeños, suele ser útil el hacer lavados de las fosas nasales con
suero fisiológico.
suero fisiológico.
– En casa ventilar bien las habitaciones y evitar los espacios con humos.
Tratamiento de los
síntomas:
síntomas:
– Para la fiebre
o el malestar general se puede tomar paracetamol, ibuprofeno o ácido acetilsalicílico.
o el malestar general se puede tomar paracetamol, ibuprofeno o ácido acetilsalicílico.
– No se recomienda tomar antibióticos ya que se trata de una
enfermedad vírica y no bacteriana.
enfermedad vírica y no bacteriana.
– En el proceso catarral pueden darse dos tipos de tos: la tos improductiva
o seca y la tos productiva, que
ayuda a eliminar la mucosidad y, por lo tanto, no es conveniente suprimirla, a
no ser que sea tan molesta que impida el sueño o realizar una actividad normal.
Es necesario beber abundantes líquidos para facilitar la salida del moco y, en
ocasiones, se pueden tomar fármacos mucolíticos y fármacos expectorantes.
o seca y la tos productiva, que
ayuda a eliminar la mucosidad y, por lo tanto, no es conveniente suprimirla, a
no ser que sea tan molesta que impida el sueño o realizar una actividad normal.
Es necesario beber abundantes líquidos para facilitar la salida del moco y, en
ocasiones, se pueden tomar fármacos mucolíticos y fármacos expectorantes.
– Es importante el descanso y una alimentación
rica en vitaminas y minerales para ayudar a reponerse.
rica en vitaminas y minerales para ayudar a reponerse.
Remedios naturales:
– Los remedios más tradicionales contra los resfriados son
el propóleo y la equinácea. El propóleo es un excelente antiviral natural, mientras que la equinácea es a la vez antiviral y
antibacteriana. Ambas sustancias potencian las defensas
naturales del organismo, por lo que son idóneas para utilizarse cuando aparecen
los primeros síntomas.
el propóleo y la equinácea. El propóleo es un excelente antiviral natural, mientras que la equinácea es a la vez antiviral y
antibacteriana. Ambas sustancias potencian las defensas
naturales del organismo, por lo que son idóneas para utilizarse cuando aparecen
los primeros síntomas.
– Miel
y limón, para descongestionar y suavizar la garganta, el limón te aportará
vitamina C y es un antibiótico natural.
y limón, para descongestionar y suavizar la garganta, el limón te aportará
vitamina C y es un antibiótico natural.
–
Vapores de eucalipto para despejar las fosas nasales. Coloca en una olla
hirviendo agua con unas hojas de eucalipto, también puedes comprar esencia de
eucalipto en la herboristería o la farmacia. Puedes aumentar la eficacia colocándote
una toalla sobre la cabeza para absorber mejor los vapores. Por la noche y para
que los peques respiren mejor puedes poner unas gotas de esencia en un cuenco
con agua sobre los radiadores o en un humificador.
Vapores de eucalipto para despejar las fosas nasales. Coloca en una olla
hirviendo agua con unas hojas de eucalipto, también puedes comprar esencia de
eucalipto en la herboristería o la farmacia. Puedes aumentar la eficacia colocándote
una toalla sobre la cabeza para absorber mejor los vapores. Por la noche y para
que los peques respiren mejor puedes poner unas gotas de esencia en un cuenco
con agua sobre los radiadores o en un humificador.
– Jenjibre,
es uno de los mejores antibióticos naturales que existen. Puedes tomarlo en infusión
con unas gotitas de miel.
es uno de los mejores antibióticos naturales que existen. Puedes tomarlo en infusión
con unas gotitas de miel.
–
Cebolla con miel para la tos, pica muy finito la cebolla y déjala en la nevera
con 2-3 cucharaditas de miel, el caldito resultante se toma 3 veces al día, es
un remedio eficaz contra la tos y no es tan mal de sabor como en principio
parece (similar a la cebolla caramelizada).
Cebolla con miel para la tos, pica muy finito la cebolla y déjala en la nevera
con 2-3 cucharaditas de miel, el caldito resultante se toma 3 veces al día, es
un remedio eficaz contra la tos y no es tan mal de sabor como en principio
parece (similar a la cebolla caramelizada).