Bueno ya llega el calor y se acerca el fin del cole. En esta ocasión desde el blog de La Cestita del Bebe vamos a hablar como ayudar a los peques a superar una pérdida.

¿Los infantes atraviesan la pérdida de un ser querido de la misma manera que los adultos? ¿Tienen noción de la muerte en su niñez? Sin duda, ellos también sienten diversas emociones y requieren apoyo para procesar el duelo al igual que nosotros.
Los adultos suelen contar con herramientas que les ayudan a manejar momentos dolorosos. Hay quienes lo encuentran más difícil que otros, pero los niños que nunca han enfrentado una pérdida no saben cómo lidiar con ello.
Dependiendo de su personalidad, la fase de desarrollo que atraviesan y el entorno que los rodea, los niños experimentan cambios de comportamiento y etapas que nos señalan su estado emocional y qué tipo de apoyo necesitan.
Con esta guía completa para padres y educadores, te brindamos las pautas necesarias para crear un entorno seguro donde puedan expresar sus emociones con libertad, qué explicaciones son necesarias y cómo acompañarles para que el proceso de duelo no resulte difícil para los más pequeños de la casa.
¿Cuándo debería hablar con un niño sobre la pérdida de alguien querido?
Habla con un niño sobre la muerte de un ser querido lo antes posible. No retrases esta conversación ni intentes evitarlo. Los niños son conscientes de la ausencia de personas importantes en sus vidas.
Dependiendo de su edad, puedes usar un lenguaje apropiado para que pueda comprenderlo. Hazlo con cariño y delicadeza. Es fundamental que esta noticia se le comunique por alguien cercano en quien confíe.
¿Cómo se debe explicar la muerte a un niño según su edad?
El duelo infantil se vive de manera diferente según la edad. No es lo mismo para un niño pequeño que para uno que ya tiene mayor conciencia, incluso un adolescente. Hay expresiones sencillas y útiles que puedes emplear para facilitar su comprensión:
Menores de 5 años. Aún no comprenden realmente el concepto de la muerte, pero puedes expresarlo de manera que lo entienda: «Se ha ido y no está con nosotros. No volverá, pero siempre lo recordaremos. «
Entre 6 y 9 años. Pueden captar que la muerte es algo definitivo, aunque no tengan claro el concepto del todo. Puedes explicarle que la persona se ha ido y no regresará. Es probable que haga preguntas, así que respóndelas con sinceridad utilizando un lenguaje que le sea claro.
A partir de los 10 años. Estos niños y niñas comprenden la muerte como lo haría un adulto y pueden abordar emociones de forma más completa. Dile que la persona se ha marchado y anímale a preguntar lo que desee o expresar sus sentimientos para poder liberar su carga emocional.
Nadie conoce mejor las habilidades de un niño que una persona cercana a él, y es importante saber cómo compartir noticias difíciles como esta. Es recomendable utilizar un lenguaje directo, simple y claro, que ayude a entender la pérdida y su permanencia en la memoria.
¿Es apropiado decirle a un niño que ‘se fue al cielo’?
Según las creencias personales, hay quienes explican a los niños que un ser querido que ha fallecido se encuentra en el cielo. Esta es una decisión individual.
No se necesita ser creyente para usar esta frase. A veces, los niños más pequeños requieren encontrar un lugar específico para la persona que se ha ido, y mencionar que está en el cielo resulta práctico.
Aun así, puedes describir lo que significa la muerte, cómo el cuerpo deja de funcionar y que la persona ya no está presente. Si tienes fe en el alma o en conceptos similares, puedes consolar a un niño durante el duelo al decirle que esa persona está en otro lugar, cuidándole y acompañándole.
¿Es recomendable llevar a un niño a un velorio o funeral?
Sí, si tú lo deseas y el niño también se siente cómodo con la idea, puedes llevarle. No hay ningún problema en ello. Esta elección dependerá de cómo se sienta el pequeño y si está listo para afrontar la situación.
Antes de que suceda, aclara qué actividad se lleva a cabo en el velorio, el funeral y el entierro. Esto le permitirá decidir si le gustaría asistir. Debe estar consciente de que habrá personas tristes, e incluso algunas podrían llorar, pero esto es normal y forma parte del proceso de despedida.
Si el niño siente temor o dudas, déjale tomar la decisión. Cuando desee explorar más o sienta curiosidad, no le impidas participar, siempre con respeto y educación. Esta parte también les ayuda a aceptar que la persona no regresará.
Indicadores de que un niño tiene dificultades para sobrellevar una pérdida
Aceptar la partida de alguien que ha fallecido es complicado en la adultez, así como en la adolescencia o niñez. Es normal sentir nostalgia, tristeza, y una sensación de abandono, ya que son parte del trayecto necesario para enfrentar el duelo que experimentamos en diferentes momentos de la vida.
Sin embargo, las pérdidas en la infancia se manifiestan de una forma diferente. Hay niños que manejan el proceso de diversas maneras; sin embargo, todos requieren apoyo para volver a estar bien consigo mismos.
¿Qué señales pueden indicar que un niño está lidiando con complicaciones para afrontar el duelo?
Presta atención a estas indicaciones que podrían necesitar ayuda profesional:
- Alteraciones en su comportamiento, como agresividad, tristeza, aislamiento o reclusión.
- Dificultades para conciliar el sueño, con pesadillas y falta de descanso reparador.
- Desinterés por la comida.
- Problemas para mantener la concentración.
- Temor persistente a que otros seres queridos fallezcan.
- Juegos obsesivos que giran en torno a la muerte.
Si observas que el niño exhibe conductas inusuales, y estas persisten más de dos meses después de la pérdida o si se agravan, es aconsejable consultar a un experto. Programa una cita con un médico o acude a un psicólogo infantil para encontrar la mejor alternativa.
Facilitar la expresión de sus emociones
No pierdas la oportunidad de conversar con un niño sobre sus sentimientos respecto a la pérdida. Este es el momento adecuado para enseñarle que la muerte forma parte de la vida, y que es válido permitir que surjan sentimientos difíciles.
Pregúntale sobre su estado emocional, si se siente triste, enojado o frustrado. Los pequeños experimentan emociones como los adultos, y no es saludable reprimirlas.
¿Le resulta complicado expresarlas?
Puedes emplear el juego como herramienta, dibujar para manifestar sus emociones, o leerle historias infantiles que aborden el duelo. Hablar de la persona que ha fallecido también es beneficioso, especialmente recordando lo mucho que la amaban.
Generalmente, todos los niños que enfrentan la muerte a edades tempranas necesitan comprenderla. Ignorar el tema no es de ayuda, así que evita hacerlo.
La muerte es un acontecimiento natural, y discutirlo puede facilitar su proceso de sanación. En lugar de considerarlo solo un aspecto negativo, se puede abordar de modo positivo recordando momentos gratos vividos con el ser querido que se ha ido, para así fortalecer la conexión.
¿Cuánto tiempo le toma a un niño superar un duelo?
El tiempo que toma superar un duelo en la infancia es muy variable. Hay niños que apenas parecen notar la pérdida, mientras que otros la enfrentan de manera más intensa. Esto depende de la relación que mantenían con el fallecido, así como de su edad y capacidad de comprensión.
Hay niños que al comienzo no presentan señales, ya que no son conscientes de lo sucedido. Con el paso del tiempo, podrían sentir la ausencia. Es importante estar atentos a sus sentimientos en caso de que requieran asistencia.
No se puede establecer un período específico para que un niño supere el duelo. Lo que es fundamental es que los más pequeños cuenten con apoyo continuo, mientras que los adultos debemos ser comprensivos y pacientes.